Redes sociales y conductas antisociales en adolescentesdiseño y aplicación de una intervención educativa desde el ámbito escolar

  1. Milan Fitera, Antonio
Dirixida por:
  1. Santiago Ortigosa López Director

Universidade de defensa: Universidad Complutense de Madrid

Fecha de defensa: 30 de novembro de 2014

Tribunal:
  1. Gonzalo Jover Olmeda Presidente/a
  2. María Rosario Limón Mendizábal Secretario/a
  3. Ángel de Juanas Oliva Vogal
  4. Jorge Sainz González Vogal
  5. Marta Ruiz Corbella Vogal

Tipo: Tese

Resumo

La presente investigación tiene una doble finalidad: disponer de datos periódicos sobre la situación y evolución del fenómeno del maltrato entre iguales; y promover una serie de medidas y propuestas educativas para prevenirlo. Hay un dato objetivo a nuestro alcance que nos ofrece la posibilidad de cuantificar las conductas de maltrato: los contenidos de los foros de sus redes sociales (SNS). Dada la inmensa popularidad de las redes sociales entre los adolescentes estos sitios web se han convertido en una parte integral de sus vidas. Las SNS pueden contribuir a la comprensión del comportamiento de los escolares, y convertirse en una herramienta potencial de prevención del maltrato entre iguales. Este trabajo tiene como objetivos: analizar el desarrollo de conductas antisociales entre adolescentes a través de las redes sociales, y su evolución en los años 2011, 2012 y 2013; diseñar y aplicar una intervención docente de actuación preventiva en cada uno de los sectores de la comunidad educativa durante esos tres mismos años, para después verificar si esa respuesta escolar articulada es eficaz educativamente, y hace disminuir la aparición de conductas antisociales entre iguales en los mismos foros de las redes sociales analizados previamente. Para ello se estudia la metodología del análisis de contenido y se aplica en el estudio de los foros de una muestra de control de 300 perfiles de las redes sociales de adolescentes de 14 años. Se concretan las categorías objeto de estudio (agresiones verbales, agresiones no verbales, actitudes machistas, comportamientos racistas y conductas eróticas) y se lleva a cabo el análisis de contenido de esta muestra de control durante tres años consecutivos: 100 perfiles distintos cada año (desde enero-marzo de 2011 hasta enero-marzo de 2013), hasta completar los 300 en total. Paralelamente, se diseña una intervención educativa para padres, profesores y alumnos articulada desde la escuela, y se aplica a una muestra experimental de escolares durante tres cursos: desde 6º de primaria hasta 2º de ESO. En 3º de ESO, cuando los alumnos han cumplido 14 años, se vuelve a aplicar la técnica del análisis de contenido a 30 perfiles de esta muestra experimental, para comprobar si la intervención escolar ha disminuido la aparición de conductas antisociales en comparación con los 300 perfiles de la muestra de control. Previamente se comprobó que las particularidades del tipo de centro escolar de la muestra experimental no adulteraban la muestra de control, analizando una primera muestra piloto que validó estos datos. Se encontró que el uso cada vez más generalizado de las redes sociales entre los adolescentes de 14 años favorece la aparición de conductas antisociales en los foros de sus perfiles, si no va acompañado de una prevención eficaz por parte de todos los agentes que intervienen en la acción educativa. En concreto, el 58% de los perfiles analizados contiene agresiones verbales, el 28% agresiones no verbales, el 18% actitudes machistas, el 24% actitudes racistas y el 45% actitudes eróticas. La intervención educativa diseñada y aplicada en este trabajo redujo a la mitad la aparición de cada una de las conductas antisociales analizadas. Las diferencias fueron estadísticamente significativas en las agresiones verbales y en las conductas eróticas. Se encontró cierta prevalencia de los chicos frente a las chicas en la aparición de tres de las cinco conductas antisociales estudiadas: agresiones verbales, agresiones no verbales y actitudes machistas (en las dos últimas las diferencias encontradas fueron significativas). Sin embargo, en la aparición de actitudes eróticas se encontró cierta prevalencia de las chicas frente a los chicos, aunque las diferencias no resultaron ser significativas. En la aparición de comportamientos racistas no se encontraron diferencias entre ambos sexos. El tipo de centro (público o privado) no influyó significativamente en la aparición de conductas antisociales.