Las modificaciones legislativas como estructura de oportunidades para la inclusión políticael caso del pueblo emberá

  1. Castaño Herrera, Francisco
Dirigida por:
  1. Mª Ángeles Huete García Director/a

Universidad de defensa: Universidad Pablo de Olavide

Fecha de defensa: 12 de enero de 2021

Tribunal:
  1. Francisco Sánchez López Presidente/a
  2. David Moscoso Sánchez Secretario/a
  3. María Teresa Terrón-Caro Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 633753 DIALNET

Resumen

Históricamente los pueblos indígenas han sido sometidos y, al mismo tiempo, excluidos por las dinámicas de una sociedad considerada como mayoritaria. Este accionar los condujo a emprender una lucha permanente por su reconocimiento como actor social legítimo. Se originó entonces un fenómeno social, dentro del cual se utilizaron diferentes formas de acción para acceder a condiciones de vida dignas, como la confrontación directa, aunque también medios pacíficos e incluso constitucionales. En la presente investigación, en la comunidad académica y en las instituciones, se hace referencia a los indígenas como sujeto individual y colectivo de derechos. Esta realidad social ha sido considerada de gran importancia por parte de algunos profesionales de las ciencias sociales, quienes han desplegado numerosas investigaciones sobre las transformaciones socioculturales surgidas desde los movimientos indigenistas. Los trabajos investigados han abordado aspectos tales como: su etnia, sus formas organizativas, su tejido social, entre otros. Sus conclusiones han evidenciado cómo, desde años atrás, las comunidades étnicas en general han sido consideradas minorías, tanto en la praxis como en el discurso. Esta consideración, a su vez, permite desvelar una relación de sometimiento por parte del Gobierno de la sociedad mayoritaria. Sin embargo, con el curso de los años ha ido emergiendo en la comunidad indígena nacional, principalmente a partir de la Constitución de 1991, un interés creciente por conocer y por participar en la política, tanto en la regional como en la nacional. Aparecen en los cuerpos legislativos nacionales los primeros representantes indígenas, y en 2012 sucede un hecho bien interesante para la sociología: la toma del poder regional por parte de una comunidad indígena. En esa lógica se inscribe la presente investigación, cuyo propósito consiste en verificar, a través de una investigación de tipo ex post facto, que lo afirmado por el sociólogo alemán Hans Joas (1992, 2004) fue lo que lentamente, y a punta de éxitos relativos y fracasos costosos en sus batallas para conquistar sus derechos, se fue gestando al interior del pueblo Emberá Chamí en la región de Riosucio (Caldas, Colombia), y que se consolidó a partir de 2012. Tradicionalmente, desde la llegada de los españoles a América, el pueblo Emberá utilizó la estrategia de la confrontación directa, como la única forma posible para defender su territorio de las permanentes amenazas de los colonos y de las empresas dedicadas a explotar los recursos naturales. Todas sus luchas con el fin de defender lo suyo y poder acceder a condiciones de vida dignas. Sin embargo, y dadas las transformaciones que se han presentado en el marco normativo, especialmente desde inicios del siglo XXI, algunas cosas parecen haber comenzado a cambiar. Para el año 2012, utilizando la nueva estructura de oportunidades generada por la Constitución Política de 1991 y tal vez aprovechando la evolución permanente de la legislación indígena internacional, el pueblo Emberá de Riosucio se tomó el poder municipal por medio del voto popular y, una vez allí, se convirtió en el gestor de su propio desarrollo. Ahora, son ellos quienes solucionan sus problemáticas de vivienda, saneamiento ambiental, salud, educación y economía, y para lograrlo utilizan los recursos que les brinda el Gobierno nacional por el sistema de transferencias desde el presupuesto nacional. Todo dentro del marco social de la democracia entendida como la máxima expresión de igualdad moral de todos los miembros de la sociedad con independencia de su credo, lengua, procedencia o ideario político. La presente investigación se despliega a través de cinco capítulos, tal como se muestra a continuación: En el capítulo 1 (“La investigación”) se recogen los detalles del método y la metodología utilizados para el desarrollo del presente trabajo. Se resaltan las dimensiones de análisis consideradas para comprender la realidad estudiada y el marco de conceptos más importantes para comprender el viraje. Se presentan las formas de lucha social a que se han visto abocados los grupos étnicos en general, y se enfoca el detalle sobre los pueblos indígenas de Colombia, particularmente el pueblo Emberá Chamí. Allí, también se esbozan los planteamientos investigativos previos sobre la temática seleccionada, con la intención de resaltar que se trata de una arista del fenómeno social poco explorada, y justificada para realizar la presente investigación. En el capítulo 2 (“Los pueblos indígenas en Colombia”) se contextualiza al lector acerca de los grupos étnicos en Colombia, su estadística demográfica y su distribución espacial contrastada con la sociedad mayoritaria. También, se muestra que el grupo étnico afrodescendiente es el más numeroso en el país, seguido por los pueblos indígenas. Precisamente, por la exclusión social que históricamente han soportado los grupos étnicos, su estadística censal no había sido posible pues no se contaba con parámetros objetivos de medición demográfica que permitiesen conocer con precisión la estructura étnica de la población colombiana. Se hace un breve recuento de los resultados censales desde 1998 hasta 2005. Adicionalmente, se hace una reseña histórica del pueblo Emberá, sus tradiciones, formas de vida, cosmovisión y cosmogonía desde su identidad cultural. En el capítulo 3 (“Marco normativo indigenista”) se hace un abordaje histórico sobre el marco normativo en Colombia relacionado con los grupos étnicos, pero centrando la atención sobre la legislación indigenista, con la intención de delinear la forma en que paulatinamente fueron siendo considerados como sujetos de derecho y cómo, en paralelo, fueron participando políticamente. En el capítulo 4 (“Principales luchas del pueblo Emberá”) se relatan algunas de las principales luchas a las que se han visto abocados los pueblos indígenas en Colombia. Se muestra con esto que, si bien se ha trabajado permanentemente desde el Gobierno nacional para construir un marco normativo que proteja a los pueblos originarios y garantice sus derechos, la mayoría de las veces en la práctica no sucede así. Por corrupción, o por desconocimiento del detalle de la ley, ha primado el interés de las empresas multinacionales y de las élites. Las comunidades, reflexionando al interior de su grupo, han generado otras formas de resistencia: las mingas, las movilizaciones simbólicas y el uso de las herramientas constitucionales, para sentar su posición y tratar de contener la intervención de sus territorios, tanto por grandes empresas como por grupos armados. Todas estas nuevas situaciones han generado, a su vez, una nueva estructura de oportunidades por parte de la comunidad internacional. En el capítulo 5 (“La percepción de los actores sobre el proceso”) se hace un análisis del discurso de los actores, compilado por medio de técnicas de investigación cuantitativa, con los líderes de los resguardos indígenas legalmente constituidos en el municipio de Riosucio (Caldas). Se trata de entrevistas en profundidad, complementadas con algunas preguntas cerradas tipo intervalar, que permiten cuantificar y validar las percepciones construidas para cada dimensión del objeto de estudio. Finalmente, la “Conclusión general” (capítulo 6), donde se intenta verificar la validez de la hipótesis formulada, con base en los análisis de las entrevistas y de las calificaciones registradas para las preguntas intervalares. El pueblo Emberá, utilizando sus experiencias y aprovechando las nuevas oportunidades legales generadas, fue paulatinamente transformando sus formas de movilización colectiva en gestión legal dentro de una nueva estructura de oportunidades políticas.