El ocio ambiental-ecológico en el marco de las relaciones intergeneracionales

Resumen

En 2015, en la Asamblea General de las Naciones Unidas (Gobierno de España, 2018), los estados miembros establecieron un Plan de acción donde se especificaban una serie de Objetivos de Desarrollo Sostenible (Agenda 2030) cuya principal finalidad se centraba en la igualdad de todas las personas, en establecer una serie de medidas globales para proteger nuestro planeta y en garantizar un futuro sostenible para todas ellas. En este sentido el ocio, entendido como un derecho universal, permite desarrollar experiencias positivas, valiosas y libres (Cuenca, 2016) encaminadas a contribuir y alcanzar gran parte de dichos objetivos. Además, este tipo de experiencias de ocio valioso, poseen el potencial de contribuir al bienestar psicológico, emocional, físico y social de las personas que se implican en ellas. La dimensión ambiental-ecológica del ocio, tema central de la tesis, se define como “una manifestación específica de ocio caracterizada por la vivencia de experiencias satisfactorias motivadas por el contexto, en el sentido de estar en un lugar y/o un ambiente” (Cuenca, 2016:13). Dicha dimensión engloba actividades del tipo: viajes, excursiones, cuidado de animales y plantas, el huerto, la caza y la pesca, entre otras. Este tipo de prácticas de ocio intergeneracional, en la actualidad, ocupan un lugar destacado en nuestra sociedad. Además, se ha constatado que las experiencias de ocio ambiental-ecológico que comparten miembros de diferentes generaciones dentro del núcleo familiar son muy positivas y aportan multitud de beneficios a las personas que las llevan a cabo. Sin embargo, las actividades y experiencias relacionadas con el ocio se han visto afectadas, en estos últimos años, por diversos factores como la crisis económica, el aumento de la jornada laboral, la incorporación de la mujer al trabajo fuera del hogar, la reducción del tiempo libre y, recientemente, por la pandemia provocada por la COVID-19, lo que ha provocado un reajuste y reestructuración de las prácticas de ocio entre miembros de la familia. Por otro lado, es necesario resaltar que, en muchas ocasiones, se percibe que la figura del abuelo se limita dentro de las estructuras familiares, a ser un mero cuidador de sus nietos y/o a colaborar en las obligaciones del hogar. No obstante, esta investigación nace para comprobar algunas cuestiones que están sin responder, sobre el estado en que se encuentran las relaciones entre los abuelos y abuelas, y sus nietos y nietas en relación a las prácticas de ocio, y cuyo objetivo general fue analizar las experiencias de ocio ambiental-ecológico que comparten abuelos y sus nietos con edades comprendidas entre 6 y 12 años, residentes en la zona norte de España. En cuanto a la metodología llevada a cabo, para facilitar la recogida de datos, se incluye un estudio cuantitativo, mediante el cuestionario, y otro cualitativo, a través de grupos de discusión. Los cuestionarios se aplicaron a escolares de 6 a 12 años y a sus abuelos, y recogen la percepción de la relación amplia del ocio intergeneracional compartido. La finalidad de los grupos de discusión fue identificar los hábitos e intereses que existen cuando los abuelos y nietos comparten su tiempo juntos, bien sea por necesidad familiar o de forma gustosa, en la mejora de las relaciones y redes familiares. Los resultados obtenidos ofrecen interesantes conclusiones, entre las que se destacan que: las actividades de ocio ambiental-ecológico ocupan una posición intermedia entre las prácticas de ocio compartidas por abuelos y nietos, ocupando el cuarto lugar con un 78,2%; actividades de ocio ambiental-ecológico como pasear al aire libre, las vivencias en el entorno natural, el cuidado de animales y plantas, y los huertos, obtienen un papel relevante; la mayoría de las actividades de ocio ambiental compartidas por abuelos y nietos tienen lugar en vacaciones, mientras que otras, como como cuidar animales o el huerto, como han de ser realizadas durante todo el año, manifiestan una distribución temporal más homogénea; ciertas actividades como las excursiones, la pesca o la caza son más compartidas por hombres que por mujeres; ser jubilado y empleado por cuenta ajena es un factor determinante a la hora de compartir actividades de ocio ambiental, en concreto las excursiones, mientras que los abuelos y abuelas que se dedican al cuidado del hogar son, en general, quienes menos actividades de ocio comparten; cuanto mayor es el nivel de estudios alcanzado, más probabilidad hay de compartir este tipo de actividades con los nietos, en concreto, las relacionadas con hacer excursiones y cuidar huertos o plantas; compartir experiencias de ocio ambiental-ecológico entre abuelos y nietos contribuye a la mejora del desarrollo físico, mental y emocional de ambas generaciones, ya que favorece la asimilación de hábitos saludables, la conciencia proambiental y el compromiso con el cuidado del entorno, los vínculos intergeneracionales y el co-aprendizaje; la pandemia de la COVID-19 paralizó las actividades de ocio ambiental entre abuelos y nietos, provocando una adaptación de las mismas una vez superada dicha situación. La prospectiva de esta tesis lleva a la necesidad de realizar un seguimiento de los programas socioeducativos centrados en el ocio ambiental intergeneracional y comprobar su efectividad, dado que existen diversos programas intergeneracionales en los que las personas mayores prestan servicio a la comunidad ayudando, colaborando y tutorizando a sujetos de otras generaciones, o programas centrados en el coaprendizaje en entornos naturales con encuentros intergeneracionales en contacto con la naturaleza, susceptibles de aportar valiosos beneficios a las generaciones que de ellos participan.