Gritos pintados. Expresión, comunicación, dramatización y manipulación del dolor en el arte (en la pintura) a lo largo de la historia

  1. MACUA SAGASTI, FELIX
Dirigida por:
  1. Daniel Tamayo Pozueta Director/a

Universidad de defensa: Universidad del País Vasco - Euskal Herriko Unibertsitatea

Fecha de defensa: 21 de mayo de 2021

Tribunal:
  1. Angel Garraza Salanueva Presidente/a
  2. Jaime Cuenca Amigo Secretario
  3. Chelo Matesanz Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 154646 DIALNET lock_openADDI editor

Resumen

El trabajo propone un recorrido por la historia para mostrar cómo el Arte, en especial la pintura,fue determinante para convertir la expresión y dramatización del dolor en una experiencia cultural sobrela que se fundamentó en buena medida la estructuración social. La búsqueda de respuestas a los grandesinterrogantes de la existencia ¿quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos y, en este caso, porquésufrimos tanto¿constituyen la base del desarrollo de la humanidad. Quienes (chamanes, magos, brujos,sacerdotes y similares) ofrecieron explicaciones sobre esos asuntos trascendentales, por muy fantasiosas oabsurdas que parezcan, se erigieron como líderes de las tribus primitivas. Las religiones, junto con lafuerza de las armas, toman el poder, Es el punto de arranque de casi todas las civilizaciones. Cuando laconexión entre comunidades primarias conforma una sociedad más compleja, y la comunicación oraldirecta no alcanza a todos, los regidores espirituales y políticos descubren el poder de la representacióngráfica como potenciador de sus discursos. Los artesanos y artistas adquieren protagonismo.Esta tesis doctoral limita su campo de estudio a la llamada Civilización (Arte) Occidental,marcada en su esencia por el cristianismo. Con su monoteísmo y la figura y el mensaje de Jesucristo, hijode Dios hecho hombre para redimirnos con su muerte del pecado original, revolucionó todas las teoríassobre el dolor y comienza una nueva era. El castigo divino del sufrimiento se convierte en vía desalvación eterna si se cumplen los mandamientos y se toma a Jesús y su crucifixión como referentesupremo. Como ya apuntamos, la jerarquía eclesiástica se percató muy pronto de la eficacia de lasimágenes para que las masas de fieles analfabetos entendiesen estos conceptos tan abstractos y acatasensus mandatos, por convencimiento o por temor, La iconografía generada en torno a estas representacionesreligiosas constituyen uno de los pilares básicos del arte occidental.Se trata de comprobar la forma en la que los artistas, al dictado de la Iglesia al principio yposteriormente sin condicionantes, trataron (manipularon) el tema del dolor; como acomodaron ellenguaje estético en función de los objetivos doctrinales e ideológicos. Tras señalar las grandes causas ypretextos que justifican la preeminencia de la imagen en el discurso sobre el sufrimiento (la Pasión deCristo, los martirios, los episodios bíblicos, las guerras, las enfermedades, las ejecuciones penales, lascatástrofes, ¿); mostramos los distintos tipos de dolor y el diferente tratamiento artístico según lasépocas. El paso de simbolismo de los primeros siglos, al esquematismo medieval y a las nuevas formasnarrativas del final del gótico, que anuncian la explosión de dramatismo y calidad pictórica insuperabledel Renacimiento y el Barroco. Analizamos algunas de las obras más destacadas de cada una de estasetapas.Tras la pérdida de poder de las instituciones religiosas, con la llegada de la Ilustración, lasrevoluciones industrial y francesa, los grandes descubrimientos científicos y los revolucionariosmovimientos sociopolíticos, se afronta desde perspectivas radicalmente distintas el tema del sufrimiento;pero este sigue como centro de la preocupación mundial. Los pintores buscan fórmulas expresivas que lespermitan mostrar todo el horror provocado por las continuas confrontaciones bélicas que suman decenasde millones de muertos y el lamentable estado psicológico de depresión general. El romanticismo, elrealismo y las vanguardias encadenadas tienden progresivamente hacia un expresionismo feroz; que--más allá de la representación documental, que queda en manos de la fotografía, el cine y la televisión--culmina en el dislocamiento formal absoluto, en el grito desgarrador como única manera de mostrar ladesesperanza absoluta de la sociedad moderna. Las nuevas tecnologías, con Internet y las redes sociales,nos introducen en un futuro no menos estremecedor. Pero eso es otra historia.